martes, 12 de febrero de 2013

"Inferno" de Dan Brown engancha pero es pesado

LONDRES (Reuters) - Las primeras críticas del vertiginoso cuarto libro de Dan Brown en la serie de "El código Da Vinci" lo califican como un libro que engancha pero es "pesado" y que encantará a sus seguidores.
Los críticos dijeron que los fascinantes códigos de misterio y el turismo mezclado con la historia que aparecen en "Inferno" apasionarán a los devotos de Brown, pero atacaron al autor estadounidense por pasajes que consideraron que eran más adecuados para el guión de una película de Hollywood que para una novela.
El experto en simbología de Harvard Robert Langdon vuelve en esta última entrega sobre una serie de pistas relativas al poeta italiano del siglo XIV Dante Alighieri en Florencia, Venecia y Estambul, en una carrera por salvar al mundo de una plaga artificial letal.
La crítica del New York Times Janet Maslin dijo que la novela cuenta con un tambaleante comienzo que parece poner en peligro la "franquicia inteligente" de Brown, pero se recupera pronto.
"Para gran alivio de cualquiera que disfrute con él, el señor Brown da cuerda con una serie de pistas sobre Dante (esto es el 'Infierno', después de todo), pero también jugando con el tiempo, el sexo, la identidad, atracciones turísticas famosas y medicina futurista", escribió.
Las ventas de libros alcanzaron el nivel más alto de pedidos anteriores a su venta en la firma Waterstones desde la publicación del libro para adultos de la autora de Harry Potter JK Rowling "Una vacante imprevista" el año pasado.
Boyd Tonkin, de The Independent, calificó la novela de "pesada pero inteligente" en una crítica que pregunta si Brown puede conseguir hacer interesante uno de los complots más viejos de la ficción: un científico loco que amenaza al mundo con una funesta máquina.
"¿Puede Brown rediseñar estos aparejos de epidemia, pestilencia y contagio en un organismo viable? Aunque pesadamente, puede", escribe Tonkin.

Sin embargo, el crítico del Financial Times AN Wilson arremetió contra el libro, al que calificó de "historia sin sentido" cargada de "galimatías científicos" y que señala la repetitiva dependencia de Brown respecto a la fama de cada sitio histórico que Langdon cruza.